jueves, 12 de febrero de 2009

MENTIRAS 2010

María esperó por 10 años un bono para vivienda. Ella y los posibles futuros vecinos fueron obligados a buscar votos para el ex-diputado (y más tarde presidente de la Asamblea Legislativa) Mario Redondo y a participar como fiscales de mesa para las elecciones de Oscar Arias (claro él es el dueño). A cambio de eso entonces sí, les darían su casa. Como ya se sabe el final de la historia fue de mentira, los grandes desaparecieron y otros intermediarios terminaron de vacaciones en las playas del Pacífico con la plata bajo el brazo. Hoy finalmente tienen la casa, que no es SU casa puesto que el alcalde no quiere dar las escrituras. Esto lo menciono para que nos acordemos de cómo es que funciona la cosa (más por estas fechas donde los políticos pululan) y de cómo también terminan en el hospital los alcaldes a puro puño de la base. En el almuerzo de hoy casi me atraganto de la cólera.